El subsolador SPICA se ha diseñado para trabajar en terrenos pedregosos, difíciles y exigentes.
Los cilindros hidráulicos se contraen haciendo que los brazos se levanten ante cualquier obstáculo como piedras o raíces profundas que impidan el avance del subsolador y vuelvan automáticamente a su posición de trabajo una vez se ha superado el obstáculo. De esta manera el subsolador y el tractor quedan protegidos ante posibles enganches, realizando un trabajo non-stop.